El hermoso paisaje verde de Irlanda siempre me ha fascinado. Sin embargo, detrás de sus colinas y su rica historia se esconde un desafío que muchos emprendedores, como yo, enfrentan cuando intentan establecer un negocio aquí.
Como fundador de SEDA College, he experimentado muchos de estos desafíos de primera mano. Aquí, comparto los obstáculos más importantes que enfrenté al iniciar mi propio negocio en Irlanda y muestro las formas de superarlos.
1. Comprender la burocracia local
La burocracia en Irlanda tiene sus matices. Desde los procesos de constitución de una empresa hasta las licencias necesarias, es vital sumergirse en las normas y regulaciones locales. Después de todo, se diferencian de Brasil.
Investigar, asistir a talleres y seminarios y buscar asesoramiento fueron medidas esenciales para comprender y afrontar este desafío. Puedo decir que es menos burocrático emprender aquí, pero aún así es necesario cumplir con algunas reglas.
2. Navegar por el sistema tributario
Irlanda es conocida por sus atractivas tarifas corporativas. Sin embargo, detrás de este atractivo se esconde un intrincado sistema fiscal. Existen diversas categorías de impuestos, deducciones y créditos fiscales que deben entenderse meticulosamente.
Elegir un contador local era primordial, no sólo para cumplir con las obligaciones, sino para planificar estratégicamente y aprovechar las oportunidades fiscales. Así que este es otro consejo que doy a los que están empezando.
3. Ajustarse a la cultura corporativa
La cultura empresarial irlandesa es un mosaico fascinante. Mientras algunos sectores mantienen un perfil más conservador, otros son más innovadores.
Tuve que aprender a interpretar las sutilezas culturales en las reuniones, a valorar la “hora del té” y la forma irlandesa de establecer relaciones comerciales, a menudo establecidas en ambientes informales.
Este entendimiento cultural no sólo ha fomentado vínculos comerciales más fuertes, sino que también me ha ayudado a posicionar a SEDA College de manera más efectiva en el mercado.
4. Acceso a financiación
Conseguir financiación en Irlanda fue una de las tareas más difíciles. Aunque Dublín es un centro financiero, los criterios para otorgar préstamos son estrictos. Los bancos locales, tradicionalmente cautelosos, a menudo dudan en apostar por las nuevas empresas.
La clave fue presentar un plan de negocios sólido, que demostrara no sólo la viabilidad de la empresa sino también la resiliencia de la empresa ante escenarios adversos.
5. Competencia y mercado saturado
Irlanda, especialmente Dublín, se ha convertido en un centro tecnológico y empresarial. Esto significa que hay mucha competencia.
Cuando comencé SEDA College, tuve que encontrar formas de hacer que mi institución se destacara en un mercado ya saturado. Era esencial ser innovador y mantenerse a la vanguardia de las tendencias para prosperar frente a la adversidad.
6. Adaptación al clima
Puede parecer trivial, pero el clima irlandés, con sus días lluviosos y grises, es otro gran desafío. Para mí fue un obstáculo para mantener el ánimo y la energía, especialmente en los primeros días.
En general, el camino de ser emprendedor en Irlanda está lleno de desafíos, pero también de oportunidades. Con determinación, adaptación y un enfoque reflexivo, es posible echar raíces sólidas y prosperar.
Y es esta combinación la que sigue impulsando el éxito de SEDA College en el corazón de Dublín. ¿Y alguna vez has pensado en emprender en Irlanda?